Siniestro: incendio en un tanque de petróleo crudo

Las causas pueden ser muchas y variadas.

Al producir, procesar, almacenar y transportar sustancias inflamables en plantas industriales químicas y petroquímicas, a menudo se crean atmósferas potencialmente explosivas en las que es imperativo evitar todas las fuentes de ignición que puede causar una explosión o un incendio. Debemos evitar por todos los medios que se forme el Triángulo Del Fuego. Es decir, los ingredientes necesarios que al interactuar producen fuego y son calor, combustible y oxígeno.

El tanque para almacenamiento de combustible pareciera un elemento simple y seguro, pero dadas sus dimensiones, ocupación y contenido, tipo de construcción y por todo lo relacionado con su manejo, NO LO ES. Los tanques con techo flotante de ser alcanzados por el rayo son especialmente vulnerables y los que tienen los mayores riesgos, ya que el propio sello entre la tapa y las paredes del tanque no siempre es absolutamente estanco. Los escapes de gases inflamables dejan por los bordes del tanque una mezcla inflamable que puede iniciar un fuego mediante una chispa y con mayor razón si sobre los bordes del tanque se produce la descarga del rayo.

En los nuevos tanques desde fabrica ya traen vínculos mecánicos y derivaciones eléctricas entre el techo flotante y el esqueleto propio del tanque, estos dispositivos llamados “derivaciones” están conectadas al techo para que estén tocando la pared del tanque constantemente sin considerar la posición del techo flotante. La resistencia del contacto depende en las características del material de la derivación, la presión del contacto y el estado de la pared del tanque. La seguridad en los tanques antiguos por su construcción, deben estar sujetos a mayores inspecciones, a mantenimientos más rigurosos y requieren que sean adaptados a los estándares de seguridad conforme a las normas de protección contra el rayo vigentes.

Los tanques de techo fijo que suponemos el de menos riesgos internamente tiene una membrana de sello interno que acorde a su estado, puede permitir escapes de vapores que se escapan a la atmosfera a través de las válvulas de presión y de vacío.

En la práctica se puede minimizar el riesgo llevando un estricto control de los sellos del diafragma, en el mantenimiento de las válvulas de presión y vacío y evitando que la descarga del rayo llegue a impactar en la zona donde se forman y permanecen mezclas explosivas.

Un sistema de protección contra rayos para atmósferas potencialmente explosivas suele diseñarse según la clase de LPS II. Se puede elegir otra clase de LPS en casos individuales justificados, en caso de condiciones especiales (requisitos legales) o como resultado de un análisis de riesgos.

Las normas de seguridad vigentes para el manejo de productos inflamables describen el riesgo que suponen para este tipo de instalaciones las descargas atmosféricas (rayos). En este contexto, es importante señalar que, en tanques de petróleo no protegidos o protegidos a medias, existe riesgo de incendio y explosión debido a la descarga directa o indirecta de rayos.

Para garantizar la disponibilidad y seguridad se requiere de un sistema externo de protección contra la descarga directa de rayos y un sistema interno destinado a manejar las sobretensiones que se generan por diferencias de potenciales en los sistemas de control, medición y regulación, que incluya todos aquellos sistemas instalados fuera o dentro de la estructura a proteger que intercepten y descarguen la corriente del rayo al sistema de puesta a tierra.

Concepto de protección

En atmósferas potencialmente explosivas se utilizan frecuentemente circuitos de medición intrínsecamente seguros. La Figura 1 muestra el diseño general y las zonas de protección contra rayos de dicho sistema. Dado que en las zonas potencialmente explosivas se requiere la máxima disponibilidad del sistema y se deben cumplir numerosos requisitos de seguridad, las siguientes áreas se han dividido en zona de protección contra rayos 1 (LPZ 1) y zona de protección contra rayos 2 (LPZ 2):

• Unidad de control en la sala de control (LPZ 2)

• Transmisor de temperatura en el tanque (LPZ 1)

• Interior del tanque (LPZ 1)

Según el concepto de zona de protección contra rayos según IEC 62305-4 (EN 62305-4), en todas las líneas en los límites de las zonas de protección contra rayos deben estar previstos dispositivos de protección contra sobretensiones adecuados.

En las fotografías, se aprecia el incendio en los bordes del tanque, lo que demuestra fugas en los sellos entre el tanque y la tapa.