La Asociación Electrotécnica Argentina (AEA) reglamenta las medidas básicas de seguridad con las que toda instalación eléctrica debe contar. El objetivo primario es proteger a la instalación y a las personas asociadas a su operación, y no a los aparatos a ella conectados; cada uno de ellos debe contar con sus propias medidas de protección.
Las medidas reglamentadas son de mínima, nadie le impide a Usted implementar las medidas adicionales que considere necesarias.
Las protecciones contra variaciones permanentes (varios segundos o minutos) y transitorias (algunos mili- o microsegundos) son distintas.
Las sub- y sobretensiones permanentes suelen ser de baja intensidad (+20/50%) y se protegen con supervisores de línea que ante un defecto cortan a la alimentación de la red actuando sobre otro aparato, como, por ejemplo, un interruptor automático.
Las sobretensiones transitorias suelen ser de alta intensidad (varios kV) y se protegen con descargadores de sobretensión o pararrayos. No cortan a la alimentación de la red ante una falla.
Sólo existen protecciones contra subtensiones transitorias (microcortes) para instalaciones industriales o redes de distribución de energía.