La actividad de la construcción volvió a registrar un descenso del 2,9% en comparación con el mismo mes del año pasado. En el acumulado durante los primeros cinco meses del año, el descenso en la actividad alcanzó el 1,9% interanual. Por segundo mes consecutivo, la obra pública dio cuenta de cierta ralentización en la ejecución de los presupuestos como también en los pagos desde el Ministerio de Economía, tal como lo había señalado el titular de la Cámara de la Construcción, Gustavo Weiss.
La actividad de la construcción registró un descenso del 2,9% en mayo
La actividad de la construcción cayó por segundo mes consecutivo. En el acumulado entre enero y mayo ya registra un descenso interanual del 1,9%. Fuerte caída en los insumos vinculados a la obra pública.
Durante mayo, el consumo de asfalto registró una caída del 9,6%, mientras que la merma en hierros redondos y aceros fue del 8,3%. En ladrillos huecos, la baja fue del 15%. En cales, el resultado fue un descenso del 8,7% y en yeso, una caída del 5,9%. Cada uno de estos insumos son claves en el entramado de las obras públicas que se ejecutan en todo el país.
Otro dato para tener en cuenta tiene que ver con la autorización de nuevos permisos de edificación. “La superficie a construir, autorizada por los permisos de edificación otorgados para la ejecución de obras privadas en una nómina representativa de 176 municipios, registró en abril de 2023 una baja de 23,6% con respecto al mismo mes del año anterior”, puede leerse en el informe del Indec.
A su vez, la superficie autorizada acumulada durante el primer cuatrimestre del año registró una baja de 7,6% con respecto al mismo período del año anterior.
Desde agosto del año pasado, la actividad de la construcción ofrece indicadores mensuales con signos de un freno en la actividad. Entre agosto y diciembre, los resultados mensuales fueron todos negativos, dando cuenta del freno económico gestado para la segunda parte del 2022, en coincidencia con la llegada de Sergio Massa al ministerio de Economía y la ejecución de un recorto del gasto público en términos reales.
En cambio, en 2023 los movientes mensuales fueron dispares. En enero, se había registrado una suba mensual del 3,9%, una caída del 2% en febrero y luego dos alzas consecutivas del 4,2 y 3,2 por ciento entre marzo y abril. En mayo, volvió a registrarse una caída mensual. En el acumulado enero – mayo de 2023, el descenso en la actividad llegó al 1,9%.
Estos datos dan cuenta que uno de los principales motores de la economía, como lo es la construcción, ya sea por su tracción hacia otras industrias o por su capacidad de contratación, no es lo que solía ser.